Poco más de tres horas estuvo Miguel Crispi, jefe de asesores del segundo piso de La Moneda, ante la Comisión Especial Investigadora por el caso “Convenios”. Más de 180 minutos en que respondió las inquietudes de los parlamentarios sobre cómo y cuándo -por ejemplo- se enteró de lo que pasaba con la Fundación Democracia Viva, evento que marcó la explosión del mayor caso de corrupción del último tiempo.
José Miguel Castro, presidente de la CEI, y Juan Carlos Beltrán, integrante de la misma, posteriormente enviaron una carta al Presidente Boric donde le solicitan evaluar “la continuidad del Señor Crispi y se disponga una investigación para determinar si hubo una infracción de deberes legales, remitiendo en definitiva los antecedentes al Ministerio Público”.
Los parlamentarios de Renovación Nacional le exponen al Mandatario que Miguel Crispi reconoció en la comisión que “el Presidente se enteró el 16 de junio, como es de público conocimiento (…) el 7 de junio, antes que el Presidente de la República, tomé conocimiento de un rumor, donde señalaban que había una situación en Antofagasta donde Daniel Andrade tenía una participación que tenía un vínculo con el seremi de vivienda”. Sobre lo cual después agregó Crispi “lo derivé a la Subsecretaria de Vivienda”.
En cuanto a esta acción, tanto Castro como Beltrán afirman en la misiva que “el máximo asesor presidencial tenía conocimiento de las denuncias antes de lo reconocido por S.E. y el resto de los funcionarios gubernamentales”. Entonces, queda claro que las “denuncias que tomó (Crispi) revestían gravedad, en tanto no dudó en requerir antecedentes de la Subsecretaria de Vivienda y Urbanismo”.
Finalmente, cabe consignar que la carta con la firma de los dos parlamentarios RN que integran la Comisión Especial Investigadora, fue enviada esta misma jornada al Presidente Gabriel Boric, para que “evalúe la continuidad del Sr. Crispi” y se disponga la investigación que determine si hubo infracción de deberes legales.
